Las estaciones de combustibles de la línea noroeste están siendo vigiladas, no militarizadas, pero sí se le mantiene una vigilancia militar a propósito del problema de contrabando de combustible hacia Haití, algo que ocurre con regularidad en el territorio nacional cada vez que en el territorio vecino hay desabastecimiento.
Sin embargo, poner uno o dos militares a custodiar una estación de estas jamás puede ser efectivo en el control de la situación, “con los militares se resolverían en el acto, porque hay muchas maniobras para sortear los controles”, alegó Juan Bonilla desde la emisión de hoy de su programa Pasando Revista que transmite diariamente Luna TV canal 53.
Hay camiones que pasan la frontera vacíos pero los tanques van llenos de gasol, sin control hablamos de un gran negocio, se ha dicho delante de las cámaras del programa.
“Cuando en Haití hay crisis de combustible, lo que debiera hacer el gobierno del estado dominicano es facilitar el paso del combustible y no hablar tanto de contrabando.
“Pongámonos en el lugar de los haitianos, si la situación fuera a la inversa, si los que necesitáramos fuéramos nosotros y tuviéramos frontera con Estados Unidos, por ejemplo, qué haríamos, pues buscarlo del otro lado, porque es un problema de supervivencia, porque no solamente es combustible, el gas es lo peor, multitudes de gente hacen filas en las estaciones en busca de gas y esa mafia que existe allá, sacan el gas de las estaciones y especulan afuera”, aseguró de su lado Marcos Martínez.
“Si no hay combustible en Haití, cientos de miles de haitianos pudieran venir para acá, incluso hay quienes penetran en la frontera sur y cortan los árboles para hacer carbón. Desde el estado se debería contribuir con la estabilidad de Haití en lo que a combustible se refiere, como ha sucedido con la alimentación, que productos de aquí han mantenido a flote el país vecino vendiéndole sus producciones”, declaró Bonilla.
Causas detrás la crisis
El traslado de combustible desde Dominicana hacia Haití está incidido por el atraso en el pago de la factura petrolera que tiene la nación vecina con sus suplidores de combustible.
A tamaña situación se le une la subida de los precios en los derivados del crudo que agudiza la crisis, al punto que los costos de los combustibles han experimentado un alza de más del 100 por ciento. Todo eso se da en un escenario en que República Dominicana tiene precios controlados que resultan atractivos para negociantes haitianos.
Otro factor no menos importante que agrava la crisis, y estimula el paso de los nacionales haitianos hacia zonas fronterizas para adquirir esos productos, es que las bandas haitianas tienen el control de varias zonas, lo que restringe el desplazamiento de algunos camiones tanqueros.
Esta situación ha puesto en alerta a las autoridades dominicanas, quienes han establecido controles para evitar que el combustible importado por los dominicanos sea sacado del país y llevado a territorio haitiano.
Acciones del gobierno haitiano
El jefe de Gobierno de Haití, Ariel Henry, sugirió un progresivo aumento de los precios del combustible, ante las fluctuaciones al alza en el mercado internacional.
“Esta es la condición de que podamos importar el combustible y ponerlo a disposición de forma permanente”, ha dicho el gobernante durante una alocución a propósito del primer aniversario de su llegada al poder.
Henry manifestó que será un esfuerzo que le pedirá gradualmente al pueblo haitiano, y felicitó la madurez de los ciudadanos cuando el pasado año el Gobierno decidió reducir las subvenciones de los productos derivados del petróleo.
El Gobierno de Haití había desmentido el pasado martes que existiese escasez de combustible en el país centrocaribeño, pese a que muchas gasolineras se mantuvieron cerradas en las últimas semanas y se disparó el precio de los carburantes en el mercado informal.
Aludieron que se trataba de un racionamiento artificial y señalaron a los dueños de estaciones de servicio que se niegan a vender el producto para destinarlo al sector informal.
