Por primera vez en la historia, India ha elegido este jueves como presidenta a una mujer miembro de una comunidad tribal, Droupadi Murmu.
A sus 64 años, la sucesora del actual mandatario, el “intocable” Ram Nath Kovind, ha obtenido 2.824 de los 4.754 votos emitidos, según ha anunciado el portavoz del Parlamento, Pramod Chandra Mody.
“Una hija de la India procedente de una comunidad tribal nacida en una parte remota del este de la India ha sido elegida nuestra presidenta”, ha anunciado el primer ministro del país, Narendra Modi, tras conocerse los resultados.
Para el político, Murmu se ha convertido “en un rayo de esperanza para nuestros ciudadanos, especialmente para los pobres, marginados y oprimidos”, ha remarcado.
Murmu será la decimoquinta presidenta de la India desde su independencia en 1947 y la segunda mujer en ocupar el cargo más alto del país cuando Kovind termine su mandato, el próximo 24 de julio y después de haber derrotado al candidato de la oposición, Yashwant Singh.
El pueblo de la nueva presidenta celebra su elección
La mayoría de los habitantes del pueblo de Uparbeda, en el este de India, de donde es originaria Murmu, han celebrado la elección de la nueva presidenta en la calle cantando y bailando y los artistas tribales han tocado los tambores y han distribuido dulces.
Sin embargo, su victoria no ha sido ninguna sorpresa. La política partía como favorita al contar con el apoyo del partido nacionalista hindú BJP del primer ministro indio, que tiene una mayoría parlamentaria.
Su activismo por los derechos de las comunidades tribales dentro de su propio estado la han llevado a ganar reconocimiento y a ocupar varios puestos de influencia en la región.
De hecho, un año después de la llegada de Modi al poder, la apodada como “hija de Odisha” fue elegida gobernadora del estado oriental de Jharkhand, un puesto que ocupó hasta 2021.
Origen humilde como elemento inspirador
Murmu nació en el seno de una familia de la comunidad étnica santal en el oriental estado de Odisha. Por eso, cuando se hizo pública su designación para la carrera presidencial a finales del pasado junio, Modi resaltó su origen humilde como un elemento inspirador para “millones de personas, especialmente aquellas que han experimentado la pobreza y se han enfrentado a dificultades”.
Su candidatura supuso un guiño a la discriminada comunidad, que representa un 8,6% de la población india y que vive en condición de pobreza y con limitados recursos económicos.
La política jurará su cargo el próximo lunes, un puesto que tiene un contenido más protocolario de acuerdo con la Constitución india, ya que es la figura del primer ministro la que tiene las funciones de jefe del Ejecutivo.
